Unción de los Enfermos

La Unción de los enfermos se administra para traer fuerza espiritual e incluso física durante una enfermedad, especialmente cerca del momento de la muerte. Es muy probable que sea uno de los últimos Sacramentos que uno recibirá.

Se alienta a los enfermos o enfermos crónicos a recibir el Sacramento de la Unción. Las llamadas urgentes se atenderán a cualquier hora del día o de la noche llamando a Rectoría. En casos de enfermedad prolongada, se pueden hacer arreglos para visitas regulares llamando a la Rectoría al (201) 997-0700 para hablar con un sacerdote o diácono.

El Catecismo de la Iglesia Católica afirma que la gracia especial del Sacramento de la Unción de los Enfermos tiene como efectos:

• ​La unión del enfermo a la pasión de Cristo, por su bien y el de toda la Iglesia;
• El fortalecimiento, la paz y el valor para soportar cristianamente los sufrimientos de la enfermedad o la vejez;
• El perdón de los pecados, si el enfermo no pudo obtenerlo mediante el Sacramento de la Penitencia/Reconciliación;
• La restauración de la salud, o preparación para pasar a la vida eterna.